Siempre he creído que la vida es como una carretera...con cuestas ascendentes, descendentes, e incluso bajadas en picado, con rectas, curvas y cruces de caminos....
Y cuando por fin te has situado, ves el camino recto y pisas el acelerador...de repente aparece una nuevo encrucijada en tu vida en la cual necesitas pararte y pensar bien cual es la dirección que debes tomar..
A mi siempre me ha encantado meditar paseando al lado de un riachuelo, sentarme en el campo y escuchar el agua corriendo
Hoy ha salido un día realmente estupendo.....
Y me ha gustado reencontrarme contigo.....mi querido río
Pero... como dice el dicho.. tras la tempestad vuelve la calma... o era tras la calma vuelve la tempestad
...ummm no lo se
Pero venga va!!.Una vez te has reencontrado contigo mismo...haz eso que siempre te ha gustado..Ponte de nuevo en marcha...enciende el motor, arranca... y dale rienda suelta a los sentidos......Sube el volumen!!!..Dale caña y vámonos!!!
2 comentarios:
qué entrada más vitalista ¡gracias!
Yo paseo por la orilla del mar y experimento similares sentimientos :)
abrazos de Sur a Norte
No es mala opción tampoco..pena es no tenerlo más cerca.
Un saludo Mariluz!!
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